“La CI en las compañías cotizadas vista por sus trabajadores”

Variaciones en la crisis

Tomando como fuente el estudio conjunto, realizado por Negocio y Estudio de Comunicación, un 50,2% de los trabajadores encuestados no han observado cambios en la comunicación interna de sus empresas debidos a la crisis, por el contrario un 39,2% ha observado que “se tiene un mayor cuidado en la comunicación que se dirige a los trabajadores”, mientras que el 10,6% NS/NC.

Para la mayoría (61,6%) de los trabajadores encuestados la cantidad de acciones de comunicación interna durante la crisis no ha experimentado ni aumento ni descenso de actividad, mientras que una cuarta parte (25,7%) declara que se han incrementado las acciones y una minoría (5,7%) opina que han disminuido. El 6,9% NS/NC.

Principales contenidos en tempos de crisis

Tal y como advierten los investigadores, “en un contexto de empresas en el que el impacto de los ERE ha sido menor que en las empresas no cotizadas”, los contenidos de los mensajes recibidos ‘últimamente’ (interpreto que se refiere al período –trimestre- inmediatamente anterior a los meses Julio y Septiembre de 2009, ambos incluidos) giran sobre las siguientes ideas:

[57%]: Reducción de gastos (37,1%); reducción de plantilla (7,7%); incrementar el rendimiento (7,4%); decremento salarial (3,1%); y, mantendremos los puestos más rentables (1,7%) que, a sensu contrario, significa que se prescindirá de los puesto menos rentables.

Un 21,1% ha recibido el mensaje tranquilizador de que “la empresa va bien”

El 21,7% restante se distribuye en tres grupos: los que dicen no haber recibido mensajes (12,3%); los que NS/NC (2,3%); y, otras respuestas no tabuladas (7,1%).

Hipótesis de trabajo

  1. Tamaño, dimensión económica y proyección social son factores determinantes para incluir en la agenda de gestión planes de comunicación de crisis, de manera que cuanto más pequeña es la organización menores esfuerzos dedica a la planificación de la comunicación en general y, especialmente, a la comunicación interna y a la comunicación de crisis.
  2. La mayoría de las empresas no tiene un plan de crisis ni de comunicación en situaciones de crisis, siendo la audiencia interna la que menor atención despierta para concebirlo, diseñarlo y planificarlo y, posiblemente por ello, los planes de comunicación interna de crisis vayan a la zaga de los planes de la comunicación corporativa de crisis, cuando los hay, y porque se tienden a magnificar los efectos externos sobre los internos.
  3. La práctica informacional más habitual en tiempos de crisis, en los mejores casos, se posiciona en el eje aséptico-situacional, desaprovechando la ocasión para hacer florecer el talento interno.
  4. En tiempos de crisis resulta más rentable mantener una política de información que adoptar una postura oscurantista. El eje comunicacional, además de mantener los patrones de referencia habituales –oportunidad, claridad, transparencia- conviene que sea realista, sin alarmismos ni falsos optimismos, aprovechando la oportunidad para ondear un banderín de enganche que aproveche el máximo de valor interno en la gestión de los momentos de crisis.
  5. Con bastante probabilidad, un análisis de contenido pondría de manifiesto ciertos mensajes recurrentes en períodos de crisis: los problemas se han originado en el exterior y desde el exterior la empresa se ve afectada, pero los equipos directivos velan su responsabilidad en dicho estado de situación ya que las concausas son externas (ajenas a su intervención, si bien son expertos en análisis de escenarios y una de sus responsabilidades es la toma de decisiones estratégicas)
  6. Mientras tanto se va elaborando la ‘historia’ que las describe tal concierto de causas fatídicas. En dicho escenario la audiencia es considerada como mero espectador de la ‘historia’ recreada que justifica el ‘historial’ de medidas internas adoptado y que se va informando racionadamente. En esta ‘historia’, habitualmente reducción de gastos y obtención de márgenes y beneficios se saldan con cargo a los trabajadores, pero sin depuración y con desafección de las castas directivas y, en especial, de las de mayor nivel, desaprovechando una ocasión ejemplar.

© jvillalba